Un proyecto de paisajismo implica mucho más que proponer qué especies vegetales deben componer un jardín; detrás de esta visión equivocada tenemos todo un mercado de actividad en constante expansión.
Comprender lo que constituye un proyecto de paisajismo, lo que hace un diseñador de paisajes y por qué el paisajismo es diferente de la jardinería es el primer paso para cualquiera que desee desarrollar proyectos de paisajismo.
¿Está interesado en el campo de los proyectos de paisajismo pero no sabe por dónde empezar? ¡Cálma, esta publicación presentará este universo y responderá todas sus dudas! ¡Compruébelo a continuación!
El paisajismo es un concepto que incluye tanto el entorno físico como la percepción que las personas tienen del espacio, que involucra recursos naturales y físicos y otros elementos de un paisaje.
Podemos definir el paisajismo como un proceso de diseño, creación y mantenimiento de un paisaje; integrando elementos naturales como plantas, vida silvestre y elementos artificiales.
En este escenario, la confusión entre paisajismo y jardinería es muy común, ya que ambas actividades implican trabajar con plantas. Así que aclaremos la diferencia entre los dos.
El paisajismo y la jardinería implican la creación y mantenimiento de espacios que se ocupan de la armonización entre la vegetación y los elementos arquitectónicos, ya sea en un pequeño patio trasero o incluso en parques enteros.
A pesar de estar en el mismo campo de actuación, el paisajismo y la jardinería tienen unas características que los diferencian. Veamos.
Un paisajista diseña espacios creando micro y macro paisajes, utilizando vegetación, elementos naturales y otros materiales de forma funcional y armoniosa.
El trabajo de un paisajista implica el diseño del espacio, considerando una serie de información técnica como: carta solar, morfología y anatomía de la vegetación (familia, especie, etc.), tamaño (grande, mediano, pequeño, cama, arbusto, árbol, etc.) entre otras diversas características y peculiaridades del espacio.
Esta propuesta debe estar en armonía con otros elementos arquitectónicos como aceras, terrazas, pérgolas, fuentes, lagos, entre otras estructuras, que conforman el espacio que se trabaja.
Otros aspectos en los que trabaja el paisajista son la mezcla de colores y la iluminación artificial, permitiendo la contemplación del espacio en interiores o en periodos sin luz natural.
El rol del jardinero consiste en plantar y mantener jardines, empleando técnicas que involucran identificar el Ph del suelo, combatir plagas, manejar herramientas adecuadas, trasplantar especies, entre otras atribuciones.
La jardinería es una actividad continua ya que los jardines requieren cuidados especializados que incluyen la ecología del suelo, el clima, la fisiología vegetal, el drenaje del agua y la correcta lucha contra las plagas.
Si bien es una actividad continua, el jardinero suele realizar labores temporales, donde asiste semanal, quincenal o mensualmente para cortar el césped, podar y remover malas hierbas, entre otras actividades.
Es muy común que el cliente no piense que el desarrollo de un proyecto de paisajismo es importante, pensando que sólo un boceto es suficiente para su ejecución, con el fin de reducir costos y ahorrar tiempo.
Sin embargo, tenemos una serie de precauciones que se deben tomar para asegurar el éxito del paisajismo del espacio tales como: características del suelo, topografía, clima imperante e incluso la presencia de animales.
Entendamos qué ventajas puede aportar un proyecto de paisajismo:
Para trabajar en el desarrollo de proyectos de paisajismo es muy importante que tengamos un conocimiento correcto de las diversas funciones de un paisajista.
Un paisajista hace mucho más que diseñar jardines pues realiza toda la planificación de los espacios verdes; transforma los espacios interiores y exteriores utilizando técnicas y procesos de composición espacial.
¡Conozcamos 10 cosas que hace un paisajista!
A diferencia de lo que mucha gente piensa, la elección de especies de plantas para un proyecto de paisajismo no se limita a factores estéticos como los colores.
La elección de la vegetación debe tener en cuenta una serie de factores como: ubicación geográfica, incidencia de luz natural, velocidad del viento, caída de hojas, fertilización, frecuencia de riego e incluso toxicidad.
Otro factor muy importante es el crecimiento de las raíces. Dependiendo de la especie, puede causar problemas como la rotura de aceras, la obstrucción de tuberías o incluso puede comprometer los cimientos.
Los jardines verticales son una tendencia que está aquí para quedarse, ya que permiten la presencia de un jardín en espacios con poca o ninguna tierra, como los apartamentos.
Mucho más que una hilera de jarrones fijados a la pared, la implementación de un jardín vertical necesita tener en cuenta factores como: incidencia de lluvia, incidencia de luz, crecimiento de vegetación, desarrollo de raíces y otros detalles.
Los jardines verticales demandan un mantenimiento diferenciado como una correcta poda, fertilización, riego o incluso cuidados por exceso de humedad; no sólo para las plantas sino para el muro.
Un proyecto de paisajismo cuenta no solo con vegetación, sino también con espacios de socialización, contemplación o esparcimiento, que no se limitan a plazas y parques, sino también a jardines residenciales.
Para estos espacios es necesario contar con muebles adecuados que sean resistentes a las inclemencias del tiempo, como el viento, la lluvia y el sol.
Es función del paisajista elegir y concretar correctamente este tipo de mobiliario, que no solo debe potenciar el espacio sino también ofrecer durabilidad y seguridad de uso.
Además del mobiliario, un proyecto de paisajismo puede tener diferentes estructuras que, aparte de armonizar con el espacio ofrecen abrigo y sombra; como pérgolas y cenadores.
La pérgola es una estructura de madera con vigas a la vista dispuestas en paralelo que controlan el paso de la luz, donde es habitual la presencia de enredaderas o jarrones suspendidos.
Los cenadores, en cambio, son cubiertas sostenidas por columnas, sin paredes, que ofrecen un espacio sombreado.
Definir los caminos de un proyecto de paisajismo que lleve al visitante por el espacio es otra tarea del paisajista. Ayudan en la contemplación e incluso en la conservación de la vegetación, evitando que el visitante pise plantas más delicadas.
Los caminos mal diseñados pueden inducir a los visitantes a tomar senderos para acortar la ruta, dañando las plantas.
Otro aspecto importante son los materiales utilizados, que deben garantizar la seguridad, evitando accidentes como tropiezos o resbalones.
Un elemento muy valorado en cualquier proyecto de paisajismo es la presencia del agua, que además de hacer más refrescante el ambiente, el sonido de su movimiento es relajante y tranquilizador.
El paisajista puede indicar la mejor solución para el espacio como por ejemplo fuentes, cascadas y duchas, que son las más populares.
Incluso en espacios reducidos, hoy en día existen soluciones verticales como pequeñas cascadas o paneles tipo “velo de novia”.
Cuando hablamos de paisajismo y colores, el verde es obviamente la primera opción que se nos viene a la cabeza, pero hay, además de las distintas tonalidades, una amplia gama de especies coloreadas, lo que permite la creación de diferentes propuestas para el espacio.
Un paisajista utiliza colores para crear diferentes atmósferas para un jardín, teniendo en cuenta el período de floración para que la combinación de colores correcta se produzca en la misma época del año.
En un proyecto de paisajismo el profesional tiene que tener en cuenta que estamos hablando de un entorno de vida que no sólo cambia con el tiempo, sino que también tiene especies sensibles a algunos tipos de fuentes de luz.
Luminarias empotradas, proyectores, focos, balizas, postes y varios otros tipos de fuentes de luz pueden hacer la composición del proyecto de paisajismo, realzando aún más el espacio proyectado.
Las piedras naturales ofrecen la posibilidad de crear diferentes patrones y estéticas en un proyecto de paisajismo, de manera que el paisajista debe tener conocimiento de los diferentes tipos de patrones, sus costos y aplicaciones.
El uso de piedras naturales incluye pasos como colocar las piedras, preparar el suelo, elegir diferentes tipos de piedras y aplicarlas, decorar caminos y senderos o incluso dar forma a un macizo de flores.
Originarios de países con bajas temperaturas, que llevaron las plantas a ambientes protegidos del viento y la intemperie; permitiendo así disfrutar de la belleza de la vegetación incluso en épocas de inviernos duros.
Esta técnica permite la creación de jardines para los espacios internos del edificio, que, además del contacto con la naturaleza, son soluciones para espacios infrautilizados como las escaleras.
Sin embargo, no vale aplicar esta técnica en cualquier lugar y tampoco se puede cultivar toda especie de planta en un jardín de invierno. Es a la hora de tomar este tipo de decisiones cuando un paisajista puede orientarnos desde la preparación del sitio, eligiendo las especies y señalando cómo mantener la vegetación.
Comprender qué es un proyecto de paisajismo y las funciones de un paisajista es el primer paso para cualquiera que desee ingresar en esta área en constante expansión.
El proyecto de paisajismo va mucho más allá de la elección de las especies y la composición del espacio; involucra mobiliario, iluminación, materiales y la perfecta armonía con el entorno.
Otro elemento indispensable para su proyecto es tener una buena colección de plantillas a mano para utilizar en sus proyectos, así que lo invitamos a usar la biblioteca de familias de Blocks Revit, que tiene un catálogo enorme con actualizaciones semanales.
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